En España la edición de las ocho entregas de 64 páginas corrió a cargo de Norma Editorial, mientras que la edición integral en un volumen ha correspondido a Random House Mondadori.
El último Metabarón era uno de los secundarios de El Incal obra de Jodorwsky y Moebius. Por lo tanto esta serie de comics se encuadra en este universo del Incal, el punto de partida de la historia es recrear la larga historia sobre la genealogía de los Castaka, la misma tiene influencias de Dune y tintes de tragedia griega, en un universo de ciencia ficción.
Las entregas de la seríe orginal que se escribio entre 1993 y 2003 son:
- Othon, el tatarabuelo.
- Honorata, la tatarabuela.
- Aghnar, el bisabuelo.
- Oda, la bisabuela.
- Cabeza de Hierro, el abuelo.
- Doña Vicenta Gabriela de Rokha, la abuela.
- Aghora, el padre-madre.
- Sin Nombre, el último Metabarón
En cuanto al argumento de este comic La casta de los Metabarones que tiene tremendas influencias de Dune, como hemos comentado antes, recordando que Jodorowsky estuvo preparando una adaptación de la novela para el cine y que algunas de sus ideas se plasmaron en El incal y el universo de que emana esta saga. En el Incal nació la leyenda de los Castaka a partir del Metabarón, este personaje es desde el que se teje hacia atrás el árbol genealogico que conforman cada uno de los capítulos de la saga, hasta terminar en el último Metabarón, que es el que aparece la citada obra de Moebius y Jodorowsky.
De la narración de los hechos se ocupa Tonto, un robot que sirve al Metabarón. Este va relatando la historia del linaje de estos invencibles guerreros temidos en el cosmos.Los Castaka se rigen por el código Bushitaka, una especie de código con ciertas similitudes con el Bushido que conduce su comportamiento por el sendero de la batalla, convirtiéndoles en guerreros implacables y despiadados pero con un sentido del honor bastante acentuado. Ellos residen en el planeta Mármola, sin embargo son invadidos por el imperio que pretende explotar unos yacimientos de una sustancia llamada la Epifita, se produce un conflicto armado que diezma el linaje Castaka hasta obligar a Othon a negociar la paz con el Imperio. Esto marca el inicio de la saga.
Nos encontramos ante un space ópera en toda regla, pero con dosis de misticismo, humor que están bien engranados en la historia, lo importante de todos modos es la descripción detallada y rica de los personajes, entre los que destacan el último Metabarón y el abuelo Cabeza de Hierro, el dúo robótico que ofician de testigos y narradores de la historia y la de la legión de monstruos, criaturas, máquinas...que nos deja el buen hacer de Juan Giménez.
Desde luego como he comentado antes visualmente es una verdadera delicia y sólo por ello ya vale la pena su adquisición, pero la historia aunque tiene un nivel inferior y en ocasiones es irregular mantiene un tono más que correcto. En mi opinión de aficionado es uno de los comics de ciencia ficción que más me ha gustado ya que el argumento tiene unas grandes dosis de épica que lo hacen muy interesante.
Recordar que hay varias secuelas de las aventuras del Metabarón, que son las Armas del Metabarósn.. y una precuela con dibujo de Das Pastoras llamada Castaka ambas escritas por Alejandro Jodorowsky.
2 comentarios:
Qué maravilla de dibujo, ¡y QUÉ ENVIDIA!
Una obra de arte
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