Nos encontramos con una historia que protagonizan dos de los iconos de Marvel, es decir Spiderman y Lobezno. Ambos se veran en la tesitura de formar equipo, en una aventura en la que nuestros dos héroes se encuentran atrapados en diferentes épocas del tiempo, como el cretacico o el salvaje oeste, dando saltos sin ningún control y sin saber las razones de este extraño fenómeno en el que se ven envueltos. En un inicio los dos héroes más que ayudarse o entenderse se detestan pero en el transcurso de esta, confusa por momentos, historia terminan por aliarse. Además la historia nos depara el regreso de algún personaje inesperado como Mojo.
Jason Aaron, cuenta en el apartado gráfico con un notable trabajo de Kurbert. En el apartado narrativo se nos ofrece una historia entretenida, con un cierto toque de originalidad y que cumple con su cometido, con mucha acción, aunque sin excesivos alardes. Desde luego por momentos se hace confusa y hasta el desenlace es algo forzado que deja incógnitas en el tintero, con la clara intención de dejar la puerta abierta a nuevas aventuras, pero en lineas generales estamos ante un producto recomendable y que proporciona la enésima oportunidad de cruzar a estos dos gigantes de la casa de las ideas.
Resumiendo, un comic aceptable, aunque a un precio algo elevado para mi gusto, recomendable para los fans de los personajes y del maléfico villano de esta historia, al que considero su mayor acierto.
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