
Segunda entrega del Dr.Manhattan en la que tenemos uno de los mejores trabajos del evento, con un planteamiento realmente bueno, que hara las delicias de los amantes de la ciencia ficción, mostrando la paradoja de lo que habría pasado si a las 13:15 el señor Osterman se hubiese convertido o no en el Dr. Manhattan y como habría afectado a los acontecimientos futuros de la historia.
A modo de hacernos decidir si A o B, como las opciones de un test Straczynski, nos va mostrando el devenir del tiempo...