En este arco Frank ha vuelto, a New York para hacer lo que mejor sabe hacer, limpiar las calles. En esta ultraviolenta aventura se cruzará con los hermanos Puzzle. Castle descubre quiénes son, en la despedida de Rick Remender como guionista de la serie. El escritor hace reaparecer a parte de su familia, de que fuera resucitada y quemada por el paranoico héroe. Dentro de este entrañable reencuentro, Castle deberá ajustar cuentas con antiguos colaboradores, como Microchip, con el que ajustará cuentas.
El resto de personajes de esta insustancial historia, son los citados hermanos Puzzle, Billy Russo y Stuart Clarke. La historia se centra en la venganza entre los villanos y Frank, este último por intentar buscarlos deja las calles de New York como la franja de Gaza, en mi opinión excesivamente sangriento incluso para este personaje.
En resumen la historia hace aguas por todos los lados, de hecho ni el final convence, ni las motivaciones tampoco, si a esto unimos un poblre apartado gráfico tenemos seguramente uno de los peores cómics de Punisher que ha caido en mis manos, la buena noticia es que esta etapa finaliza y se iniciará otra, que tiene facil el mejorar la serie.
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